GIGANTES
O MOLINOS
HIJO: Padre.
PADRE: Dime.
HIJO: (Alargando el brazo y señalando el horizonte). Mira aquel molino.
PADRE: ¿Dónde tú ves un molino?
HIJO: Allí.
PADRE: Aquello no es un molino, hijo.
HIJO: ¿Qué es entonces?
PADRE: Un gigante.
HIJO: ¿Un gigante?
PADRE: No hay duda. Fíjate
bien. Ahora está quieto oteando el
paisaje. Pero dentro de un momento se
pondrá a caminar y a cada zancada avanzará una legua.
HIJO: (Tras un intervalo de silencio). Padre.
PADRE: Dime.
HIJO: (Con voz compungida). Yo no veo que sea un gigante.
PADRE: Pues lo es.
HIJO: ¿Un gigante con puertas y ventanas? ¿Un gigante con tejas y
aspas?
PADRE: Un gigante.
HIJO: (Tras una pausa). Padre.
PADRE: Dime.
HIJO: Yo solo veo un molino.
PADRE: ¿Cómo? ¿Un molino?
HIJO: Sí, un molino, el mismo de siempre.
PADRE: (Con voz grave). Tomás.
HIJO: ¿Qué?
PADRE: (Volviendo lentamente la cabeza y mirando en derechura a los
ojos del hijo). Me preocupas.
JAVIER TOMEO
1. ¿Sabes
cómo se llaman en literatura las aclaraciones entre paréntesis?
2. ¿En
qué otra obra de la literatura universal son destacables los molinos de viento?
3. Javier
Tomeo era admirador de Goya y de Luis Buñuel, ¿sabes quiénes eran estos dos
personajes?
4. Extrae
del texto 5 sustantivos, 5 verbos, 5 determinantes, 2 pronombres, 2 adjetivos,
2 adverbios, 2 preposiciones y dos conjunciones.