¿Cuántas obras
firmadas por hombres han surgido de un cerebro femenino?
Es el caso de María de la O Lejárraga, que regaló a su marido sus creaciones, tal vez porque la
época y las circunstancias o el amor, que ciega, no le dejaron otro camino.
Defendió con
intensidad la igualdad entre hombres y mujeres, pero publicó gran parte de su
obra con la firma de su marido, el empresario teatral y dramaturgo Gregorio
Martínez Sierra, seis años más joven que ella, incluso después de que él le
fuera infiel con una actriz con la que tuvo una hija.
María Lejárraga había
nacido en San Millán de la Cogolla (La Rioja), en 1874, pero muy pronto su
familia se trasladó al madrileño barrio de Carabanchel. Allí, la joven se
esforzó por acceder a una educación que no era habitual, ni mucho menos, entre
las mujeres de su época, y llegó a obtener el título de profesora de idiomas.
Cuando tenía 23 años de edad, conoció a Martínez Sierra, seis menor que ella
(una diferencia por entonces significativa), y tres años después se casaron.
Comenzó entonces una relación que tuvo una enorme trascendencia en el mundo
literario de la época: ambos fundaron las revistas Helios y Renacimiento, en las
que escribieron nombres fundamentales como los de los hermanos Machado, Juan
Ramón Jiménez, Pérez de Ayala, Unamuno, Rubén Darío y muchos otros.
María
Lejárraga y Gregorio Martínez Sierra.